Gracias a su cocción previa, es perfecto para ensaladas, ceviches, arroces, pastas y aperitivos sin necesidad de largas preparaciones.
Su textura tierna y su sabor suave lo convierten en un ingrediente versátil y fácil de combinar con salsas, especias o hierbas frescas. Se recomienda agregarlo al final de la cocción para mantener su jugosidad y disfrutarlo en su mejor punto.